Se utiliza el concepto de “brecha” para establecer la diferencia entre unos y otros según la ubicación geográfica de la población, entre colegios privados y las instituciones educativas oficiales, la debida a condiciones físicas y mentales y por situaciones de carácter étnico. Pero brecha se puede traducir como inequidad, exclusión e inclusive discriminación social.
Es que “En Colombia hay exclusión social porque la riqueza y el acceso a los servicios están mal distribuidos y no todas las personas tienen igualdad de oportunidades cuando se trata de acceder al empleo, la educación, la salud, la vivienda, el agua potable, los servicios de energía eléctrica. Hay pobreza, indigencia y desempleo, como manifestaciones y consecuencias de la exclusión social predominante, que se hace más severa en las zonas rurales”, se dice en la investigación de la cual fui su director, realizada por los estudiantes de la Maestría en Educación de la Univerfsidad del Tolima, Luis Enrique Borja Rodríguez y Diego Ricardo Vargas Palacios, con relación a los casos de Coyaima y Lérica (2010).
Una de las conclusiones de la investigación de los docentes Borja y Vargas es la siguiente: “La mayor inequidad y exclusión educativa en las zonas rurales se debe a un significativo déficit en la disponibilidad de la oferta de educativa en las instituciones educativas ubicadas en el campo. El Estado no da un trato preferencial, como suejetos de especial protección, a los estudiantes de la zona rural como estudiantes que requieren y tiene el derecho a una especial protección del derecho a la educación por su ubicación territorial o geográfica”, es decir, no se garantiza el derecho fundamental a la educación en cuanto a la disponibilidad y asequibilidad que debe garantizar el Estado, a través de la vinculación oportuna de los docentes, la dispobilidad de dotación básica para la enseñanza y el aprendizaje y en consecuencia, las inversiones requeridas para satisfacer esta sitruación, a pesar de que aparezca en los planes de desarrollo de los últimos cuatrenios.
10.996
ESTUDIANTES MENOS EN LAS ZONAS
RURALES
ENTRE 2016 Y 2020.
Se puede afirmar que hay suficientes planteles educativos
en la zona rural, pero no todos ofrecen los 5 grados de primaria y aún más
grave, tampoco se ofrece el bachillerato completo en todas las inspecciones y
veredas.
De la mirada sobre los datos cuantitativos se deduce que la
disminución de la matrícula en las sedes rurales e instituciones educativas
rurales, crece en forma acelerada. Se ha activado un semáforo en rojo, expresado en el hecho de
que, entre el año 2016 y el 2020, la matrícula cayó de 81.921 estudiantes
rurales a 70.925 en el año 2020, lo cual equivale a un decrecimiento de la
cobertura escolar en estas zonas, del 13.4%, es decir, 10.996 estudiantes
menos, de ellos 696 en Ibagué (menos 10.4% estudiantes matriculados).
¿Qué está pasando?. Se pueden inferir varias respuestas:
desinterés por la educación, de padres de familia y estudiantes. Porque unos y
otros no encuentran útil lo que se enseña en las aulas, porque no les gusta
como se les enseña, lo cual es un problema de pertinencia educativa que
alimenta la inasistencia escolar y la deserción, principalemente.
Puede ser, porque se ha incrementado la migración hacia las
zonas urbanas o los padres ubicados en las zonas rurales prefieren matricular a
sus hijos en los establecmientos educativos urbanos. Por situaciones de pobreza
en los hogares del campo, los padres no disponen de recursos económicos para
satisfacer los gastos en vestuario, útiles escolares y transporte. También
puede ser uno de los efectos de la disminución del número de infantes y
adolescentes en edad escolar, lo cual es un fenómeno demográfico, de
crecimiento paulatino.
3.325 BACHILLERES MENOS EN LA ZONA RURAL.
Hay sufientes estudios y cifras sobre las características
de la oferta educativa en la zona rural colombiana y del Tolima. Un informe de Compartir del año 2019,
(Docencia rural en Colombia) suministra datos sobre el número de años promedio
de escolaridad de los habitantes de las zonas rurales, frente a los de las
zonas urbanas. “El número de años promedio de escolaridad entre
las poblaciones rurales dispersas de 15 años y más es de 6 años solamente,
comparado con 9,6 años en zonas urbanas (MEN, 2018)”. Más de la mitad de las
escuelas o sedes rurales (el 53.4%), no ofrece los 5 grados de educación
primaria, el 8.4% ofrecen hasta el grado noveno
de secundaria y sólo un 5.1% ofrece educación media, es decir los grados
décimo y once para graduar bachileres.
En el
Tolima, ha disminuido la matrícula de los grados once, 12, 13 y ciclo 6, que son
los últimos que se cursan para obtener el grado de chaciller. De 3.585 bachilleres
en el úlyimo año que se curesa del bachillerato, en las zonas rurales en
el año 2016, se pasó a 3.325 en el año 2020, es decir , 260 menos (menos
7.l2%). Esta situación es más grave en Ibagué, donde se pasó de 412 a 292
estudiantes de grado once en el año 2020.
Es
grave esta situación porque afecta los grados de escolaridad promedio de la
población, que se espera que sea de 12 años de escolaridad, para acceder al desarrollo
económico y social esperado.
LA
INEQUIDAD EDUCATIVA RURAL.
Ruralidad
es un concepto construído para tipificar cuanto ocurre en el mundo del campo,
útil para hacer referencia a las brechas en la oferta educativa entre zonas
urbanas y rurales. Porque existe una cultura propia en el campo, así como
diferentes prácticas productivas entre uno y otro ámbito geográfico. En cuanto
a la educación, son múltiples las circuantanacias que diferencian la atención
educativa para esta población.
Jairo Arias Gaviria, docente de
la Universidad Pedagógica de Bogotá, al plantear un panorama de los “Problemas
y retos de la educación rural colombiana” (2017), describe, entre ellos, los
siguientes: “Con toda la dificultad que implica llegar a la escuela, con una
violencia que aún persiste y territorios libres para explotaciones mineras;
con una gran carencia en recursos, ausencia de salones adecuados, falta de
materiales didácticos, laboratorios e implementos deportivos, con todo eso, la
política educativa rural no es pertinente; entre otras cosas, porque bajo esas
circunstancias se da cabida un modelo educativo para ciudadanos cosmopolitas,
como imagen precisa de saberes que prepara a sus estudiantes para ser buenos
consumidores, obviando, en aulas perdidas en montañas, valles y páramos del
campo, toda la ruralidad de nuestro país”.
A ello agrega: “La educación rural debe asignar valor y estatus
académico a los saberes locales (campesinos) en un nivel similar al de los
saberes universales…Facilitar la construcción de una herramienta teórica y
me- todológica sobre los modos en que se produce el aprendizaje campesino…La
participación en la construcción y diseño de los currículos”.
PROGRAMAS ESTATALES PARA LA ZONA RURAL.
Se debe reconocer que el Ministerio0 de Educación Nacional, en
diferentes épocas, ha plateado programas de intervención en las zona rural. Uno
de ellos, quizás el más significativo y de efecto relevante, fue el Escuela
Nueva que tuvo amplia cobertura y efectos positivos, hasta el punto de que
ahora ha sido implementado en otros paises y acá en Colombia ha decaído, para
ejecutar otros.
Para dar la continuidad a este programa e implementar otros, se
creo el Programa de Educación Rural y más recientemente la Red de Educación
Rural, para las zonas afectadas por la violencia en el sur del Tolima.
Para la zona rural ejn general se desarrollan los Modelos
Edducativos Felxibles y los Proyectos Pedagógicos Productivos.
Se ha continuado con la oferta de la metiodología de Escuela
Nueva, de Pospreimaria, de Educación Media Rural y otros.
Población
matriculada en la zona rural del Tolima, años 2016-2020.
Entidad
Territorial |
Matrícula
total |
Matrícula
rural |
Variación
2020/2016 |
|||
Año
2016 |
Año
2020 |
Año 2016 |
Año
2020 |
Absoluta |
% |
|
Municipios
no no cetificados. |
183.268 |
164.342 |
74.543 |
64.242 |
-10.300 |
-13.8% |
Ibagué |
113.618 |
107.355 |
7.378 |
6.682 |
-696 |
-10.4% |
Total
Departamental |
296.886 |
271.697 |
81.921 |
70.925 |
-10.996 |
-13.996 |
Fuente.
Elaborada con base en datos de “Cobertura en cifras”, 2020, del MEN.
Matrícula
último grado de bachilerato, en el Tolima, años 2016-2020.
Entidad
Territorial |
Matrícula
total |
Matrícula
rural |
Variación
2020/2016 |
|||
Año
2016 |
Año
2020 |
Año 2016 |
Año
2020 |
Absoluta |
% |
|
Municipios
no no
cetificados. |
11.278 |
9.685 |
3.173 |
3.033 |
140 |
-4.4% |
Ibagué |
9.006 |
6.659 |
412 |
292 |
129 |
-41.0% |
Total
Departamental |
20.284 |
16.344 |
3.585 |
3.325 |
260 |
-7.2% |
Fuente. Elaborada con base en datos de “Cobertura en cifras”, 2020, del MEN.
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